Mis 10 series

Podrían ser otras, es verdad, sobre todo algunos de los puestos, que tuve muchísimas dudas con otras que citaré, ya sin mayor ceremonia, al final de la entrada. Pero podríamos decir que las 10 series de las que voy a hablar son mis series favoritas y mis más sinceras y seguras recomendaciones. ¿No has visto alguna de ellas? Apuestas seguras, oigan.

Cabe decir que estoy circunscribiendo la lista a series en imagen real y más o menos contemporáneas.



Scrubs

Esta es mi serie de médicos. Ni Urgencias ni leches. Scrubs. Esta es una comedia con momentos dramáticos. Humor absurdo salpicado de tristeza ocasional. Y la fórmula es perfecta. No estoy considerando, en absoluto, el horrible spin off que hicieron tras su final, en el que se marchaba JD; pero lo que es el núcleo de la serie, aunque cayó un poco en sus últimas temporadas, fue una lección de cómo mantener una sitcom prácticamente impecable (año de la huelga de guionistas aparte) durante 8 gloriosas temporadas. Lo que hicieron con la novena era para empezar a cargarse ejecutivos.



Fringe

La procedimental friki de ciencia ficción. A mí me empezó gustando por la temática, lo admito (bueno, y por Anna Torv), aunque ayudó ese tándem Abrams y Giacchino. Muchos otros consideran que la serie empieza a ganar peso a partir del capítulo 6, más o menos. En cualquier caso, y pese a vivir casi todas sus temporadas bajo la sombra de la cancelación me ha mantenido completamente enganchado (salvo miniarcos muy concretos que me parecieron desaprovechados), el estreno de la temporada final se ha confirmado.



The good wife

Quizá esta serie tenga el formato más normal de las que cito en la lista. Es una serie procedimental de abogados. ¿Por qué está aquí? The good wife es la viva prueba de que un procedimental puede ser una gran serie. Reparto, vestuario, dirección y guión. The good wife ha sido y es una lección televisiva sobre cómo manejar una historia con cambios bastante controlados y plagada de miradas, sonrisas y gestos. The good wife es la serie de la insinuación, y lo hace como nadie. Aunque en su inicio parecía muy, muy modesta; el paso de los capítulos dejó claro que no era así.




Firefly

Otra serie increíble a la sombra de una cancelación demasiado prematura tras un trato repugnante por parte de la cadena que la emitía. Firefly es una de esas series que uno empieza a ver (ahora, me refiero) a sabiendas de su cancelación, pero que no puede evitar disfrutar a lo largo de cada uno de sus minutos, mientras se pregunta qué clase de inútil no consiguió sacar el oro de esta mina. Una serie imprescindible.




Studio 60

Con ella conocí al señor Sorkin y ya se hizo un hueco en mi corazón seriéfilo. Studio 60, que también vivió una pronta cancelación, nos presenta una sola temporada de humor y crítica a partes iguales con un gafe Matthew Perry (desde que salió de Friends es el aviso de cancelación hecho persona) alrededor de cómo se construye un late night. Lo importante de la serie no es el programa en sí, sino lo que lo rodea. Los problemas de derechos, las tensiones del personal, los guiones hechos contrarreloj. Si no la habéis visto, esta, que no es tan conocida como otras, anotadla. Dudo que os arrepintáis.




Spaced

La serie inglesa (nunca he visto el remake yanki) es la rara del grupo. Spaced es rareza en sí misma. Es una serie que presume de ello, de su humor absurdo constante, de sus referencias frikis y de un reparto perfecto en el que destacan los ases del humor que son Simon Pegg y Nick Frost. Obligada.



Roma

Tampoco podía faltar. Roma, con sus fantásticos personajes y su respeto por la historia, con esos actores magníficos a los que yo seguí la pista cinematográfica solo por el placer de volver a encontrármelos en pantalla; todas las intrigas, las traiciones y una de las fotografías que más partido ha sacado a la televisión. 3 productoras fueron necesarias para sacar adelante las dos temporadas en que se quedó la serie, de 5 que iban a ser, pero toda la duración de esas temporadas son un verdadero regalo para el espectador. Desde Roma con amor.



Dr. Horrible

Alguno podría responder algo molesto que Dr. Horrible no es una serie propiamente dicha, y que sus tres capítulos de 12 minutos estrenados en internet quizá no se ajusten a lo esperado en esta entrada. Para esas personas me limito a recordarles que CW estrenará esta increíble serie musical basada en un súper villano este mismo otoño. Sí, la serie dura poco más de media hora, ¡pero qué media hora! De lo más divertido y más fresco que os podáis echar a la cara. Whedon se lució y sin necesidad de guionistas.





Juego de Tronos

Desde el principio creí que HBO sería la única cadena capaz de hacer justicia a la obra de Martin, y por ahora el resultado es realmente envidiable. Aparte de que, en general, han escogido un casting del que pueden sentirse orgullosos, Juego de Tronos ha introducido unos cuantos cambios sobre Canción de Hielo y Fuego y, a decir verdad, no solo ha salido indemne, sino que la mayoría de fans de las novelas los han aceptado sin grandes problemas. Y esto se ha debido a la increíble factura de la serie, que ha buscado el espíritu dentro de las posibilidades del medio y que siempre ha mantenido incorruptible lo importante, perfilando solo puntos muy secundarios que, en mi opinión, la mayor parte de las veces han resultado más convincentes que en los propios libros. Una de las grandes, sin duda.




The Wire

Así, de cabeza. Para mí, The Wire es La Serie. Cada una de sus 60 épicas horas es una lección de desarrollo argumental y de personajes. Todo en esta serie irradia cuidado, mimo, premeditación y alevosía. Esta no es una serie de sentarse y devorar una temporada seguida porque los capítulos son, a menudo, muy densos, lentos y llenos de datos; pero la resolución del arco de cada temporada y el avance imparable hacia el final de la serie son, sencillamente, perfectos. Intachable. Must see.




Se quedaron en la estacada series como Sherlock, Deadwood, Black Mirror, Downton Abbey, Crimson Petal and the WhiteBreaking Bad, Battlestar Galactica, Carnivale y Big Love, con la que tuve muchas dudas con otras de las series de la lista. Otra de las opciones era Mad Men, pero, personalmente, creo que esta serie está muy lejos ya de sus mejores momentos.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Charlie y la fábrica de chocolate - Tim Burton

Los miserables, diferencias argumentales entre novela y musical

Ozark (Temporada 1) - Bill Dubuque, Mark Williams